Troy, copropietario de Surfers Island, es un apasionado de los deportes acuáticos dedicado a compartir su amor por el surf y el kitesurf con los demás.

Nacido en el Reino Unido pero criado en la costa del sur de España, Troy se enamoró de los deportes acuáticos a la temprana edad de seis años, empezando por la navegación. Pasó muchos años practicando windsurf antes de mudarse a Fuerteventura para dedicarse al surf y el kitesurf.

Después de viajar por el mundo con Sarah, ambos regresaron a Fuerteventura para establecerse y hacerse cargo de Surfers Island juntos.

A pesar de sus responsabilidades como copropietario, la pasión de Troy por la enseñanza sigue siendo inquebrantable. Le encanta enseñar por sí solo y nunca parará; regularmente se toma el tiempo para enseñar y estar en el campo con el equipo. Con su amplia experiencia en deportes acuáticos y su compromiso con la enseñanza, Troy se asegura de que cada estudiante reciba orientación y apoyo expertos en Surfers Island.